En una cuna larga, el operador compra una call y un put a precios de ejercicio diferentes, el mismo vencimiento y el mismo producto subyacente. Es evidente la semejanza con un cono, pero la diferencia es que la call y el put en una cuna son precios de ejercicio diferentes ante el mismo precio en un cono.
Por ejemplo, si compramos un put 2395 y una call 2445, a esto se le llamaría la cuna 95-45. El coste de la cuna en este ejemplo sería 82,00. Los operadores comprarán la cuna si esperan que el mercado se empiece a mover, pero sin estar seguros de cómo.
En nuestro ejemplo, el futuro E-mini estaría alrededor de 2420 y esperamos que el futuro suba o baje, no estamos seguros de qué pasará. Es casi como un cono, pero el mercado se tiene que mover en cualquier dirección para que las opciones acaben en el dinero. El potencial de ganancias es mucho mayor que el coste de la cuna en cualquier dirección, pero como la ganancia potencial media aún es menor que un cono, las cunas costarán menos que los conos.
Por ejemplo, al vencimiento, los puntos muertos son 2313 y 2527. Son los precios de ejercicio de la call más el coste de la cuna y el precio de ejercicio del put menos el coste de la cuna. Las pérdidas se limitan al coste del diferencial. La pérdida máxima se daría lugar si el mercado estuviera entre dos precios de ejercicio al vencimiento. Como la cuna se compone de solo dos opciones largas, pierde la prima de la opción por el decaimiento temporal. El decaimiento temporal es más costoso si el mercado está entre dos precios de ejercicio.
Cuna corta. Los operadores venderán una cuna cuando esperen que el mercado se vaya a estancar. Como los operadores van a una cuna corta, se benefician según se deterioren las opciones, siempre y cuando el mercado no se mueva mucho más allá de cada precio. Como ya hemos comentado, los puntos muertos son 2313 y 2527. Los puntos muertos son los mismos independientemente de si vas a una cuna corta o larga. Para una cuna corta, se maximizan las ganancias si el mercado está entre dos precios de ejercicio al vencimiento.
El potencial de pérdida puede ir en cualquier dirección. Los movimientos dramáticos sobre el precio de ejercicio aumentarán el valor de la call. A la inversa, los movimientos por debajo del precio aumentarán el valor del put. Como vas tanto a la call como al put cortos, ambos casos se pueden aplicar. Como ir a una cuna corta es, en esencia, una opción corta, recoges el decaimiento temporal de un ritmo creciente conforme se acerca el vencimiento. Te beneficias del decaimiento que el propietario de la cuna larga pierde. De nuevo, el decaimiento temporal es más rentable si el mercado está entre precios de ejercicio.
En cuanto a estrategias de opciones, las cunas son una herramienta potencial para gestionar tu posición.